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MANCHAS DE SANGRE EN UN COCHE NUEVO (1975) – Antonio Mercero – No compres un coche de importación o tu conciencia sufrirá

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Incluso en el tardofranquismo, el no tener la conciencia tranquila era algo cuyos peligros se denunciaba. Mercero, aquí, no hizo nada más que coger el tema de fondo de uno de los más famosos relatos de Edgar Allan Poe, El corazón delator, y traspasarlo a un marido amantísimo cuya esposa le regala un coche de importación y tras presenciar un accidente, huye del lugar de los hechos. A partir de ese momento, su complejo de culpabilidad se convierte en una obsesión   FICHA TITULO : Manchas de sangre en un coche nuevo AÑO : 1975 DURACIÓN : 95 DIRECTOR : Antonio Mercero GÉNERO : Intriga psicológica ARGUMENTO : Un empresario de clase alta recibe un inesperado regalo de su esposa, un coche nuevo. En el primer viaje, presencia un accidente, pero no hace nada para ayudar a los ocupantes. El coche estalla y se producen dos víctimas: hubieran podido mancharle la tapicería del vehículo. A partir de ese momento, ve que los asientos de atrás, inexplicablemente, se manchan de sangre…

LA CABINA (1972) – Antonio Mercero – Minimalismo sobre la soledad de nuestro tiempo

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La cabina ganó en 1973 un Emmy al mejor programa de ficción. Poco para lo que merecía. La cabina es una de las joyas producidas en el tardo-franquismo. Es, sobre todo, por encima de todo y ante todo, una crítica a la soledad y al sistema (y no al sistema franquista) sino al sistema de vida, en general. Si hoy se filmara de nuevo, debería mostrarnos la cabina en la que se encuentra encerrada la mayor parte de nuestra sociedad: sin puertas, pero con una terminal 5G en la mano… El peor de todos los encarcelamientos: en una celda sin paredes. FICHA TITULO : LA CABINA AÑO : 1972 DURACIÓN : 35 minutos DIRECTOR : Antonio Mercero GÉNERO : Drama ARGUMENTO : Un padre de familia, tras dejar a su hijo camino del colegio, se introduce en una cabina telefónica recién instalada. No logra hablar por el aparato, pero queda encerrado y no hay forma de sacarlo de allí. Es objeto de burlas, de curiosidad, incluso de muestras de solidaridad, pero nada hace que pueda salir de su angustia.